Un padre tenía una hija de 5 años y un hijo de 3 siempre jugaban juntos, salían y se divertían todos en familia, la madre siempre muy cariñosa disfrutaba en ver a sus niñas jugar, pero al pasar de los años, las cosas se convirtieron cada vez más difíciles
y el padre tuvo que trabajar cada vez más duro por el bienestar de sus hijos, su padre les amaba tanto que trabajaba día a día sin descanso para que tuvieran todo los que necesitaban pero al cabo de tres años cada vez estaba menos en la casa y siempre estaba cansado y de mal humor, los niños se preocupaban pero su madre siempre les hablaba con cariño diciendo: su padre trabaja muy duro por ustedes y se siente muy cansado, el hijo ya no recordaba aquellos momentos felices por lo pequeño que era, para él su padre siempre fue así, un día su padre tuvo un día libre y se pone a ver televisión, la hija se acerca y le dice:
y el padre tuvo que trabajar cada vez más duro por el bienestar de sus hijos, su padre les amaba tanto que trabajaba día a día sin descanso para que tuvieran todo los que necesitaban pero al cabo de tres años cada vez estaba menos en la casa y siempre estaba cansado y de mal humor, los niños se preocupaban pero su madre siempre les hablaba con cariño diciendo: su padre trabaja muy duro por ustedes y se siente muy cansado, el hijo ya no recordaba aquellos momentos felices por lo pequeño que era, para él su padre siempre fue así, un día su padre tuvo un día libre y se pone a ver televisión, la hija se acerca y le dice:
-Papa podrías divorciarte de mama un tiempo
-Su padre trago frio atónito de lo que su hija le decía después de una larga pausa prosiguió diciendo porque hija si papa y mama se aman mucho
-Yo lo sé papa pero escuche en televisión que los padres que se divorcian tienen todo el fin de semana con sus hijos
El padre miro a su hija mientras se le salían las lágrimas y la abrazo con fuerza.
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